domingo, 27 de septiembre de 2009

EL AMOR...

Los invisibles átomos del aire
en derredor palpitan y se inflaman
el cielo se deshace en rayos de oro
la tierra se estremece alborozada
Oigo flotando en olas de armonía
rumor de besos y batir de alas,
mis párpados se cierran...
¿Qué sucede?¿Dime?... ¡Silencio!...
¿Es el amor que pasa?


Seguro que el maestro Becquer, lo expresa mejor que yo.

domingo, 20 de septiembre de 2009

La era popular..

Hace muchisimo tiempo que no escribo en el blog, q casi no entro, imagino que esta dejadez viene dada por la falta de tiempo o por falta de momentos, que se yo, el caso es que hoy tras meses de ausencia he vuelto y he vuelto a releer blogs y a sentirme en deuda con el mio propio.

El caso es que hoy es domingo, y por regla general todos los domingos son tristes, tiene eso intermedio entre la semana y el fin de semana que no gusta a nadie y que si se pasan solos en casa entristece bastante.
Soy bastante positiva, pero.. de un tiempo a esta parte siento que el infinito se ha encogido peligrosamente y esa tristeza viene a mi con mas facilidad que de costumbre.
Hoy en la siesta he soñado con aquellos años... con aquellos domingos en los que el teléfono no paraba de aullar y que no daba tregua, esos domingos cuando el lunes no era mas que un examen o una clase de literatura a primera hora, esos domingos llenos de risas y de proposiciones indecentes, tan ausentes en estos tiempos... esos domingos en los que era popular y los niños en la plaza les gritaba a las demás que "era la mejor" claro que jamás me lo creía, ni siquiera me gustaba que hiciesen esas cosas, pero lo hacían y me hacían sentirme en cierto modo especial, con respecto al resto. Las salidas se sucedían y los mensajes de textos a la hora de dormir también.
Las llamadas de todo tipo de amigos eran tan continuadas que hasta me agobiaba y los recreos una vorágines de cosas que contarnos y de risas. Lo que no me advirtieron nunca que ser popular llevaba consigo una carga considerable y que cuando todo esto pasase me iba a sentir así de sola.
Nunca quise ser popular, con gusto regalaba esa corona, a mi parecer de espinas, que se empeñaban en colocarme a las niñas que en cierto modo envidiaban ese trono... pero me hicieron y lo fui... y sufrí por las expectativas que se ponen con respecto a una, y sufrí por las decepciones de todos cuando ya no les sirves y lloré cuando dejó de aullar el teléfono tan seguido y cada vez menos y cada vez menos mensajes de textos,ni llamadas perdidas, ni como estas amiga? ni nada de nada. Todos siguieron sus vidas, todos hicieron a su manera y todos fueron felices y comieron perdices.
Nunca quise ser popular, sabia que terminaría sufriendo por ello y así fue.
Ahora recuerdo con una sonrisa aquella "era popular" y con cierta pena esa tristeza que dejó a su paso los años y la no adolescencia, es decir la "madurez" o la inmadura madurez.
Que si lo echo de menos? Pues no, solo ha venido a mis sueños y os hago participe de ello.
Imagino que de niños todos queremos ser populares, pero me hicieron sin quererlo y sufrí al final las consecuencias. Es mas sano pasar desapercibido y ser felices sin mas, creanme.